La presidenta de la Diputación aboga por que “la Cultura no tenga límites”
08/10/2015.- “Agustín Luceño empuja sus límites hasta arrinconarlos”, así de gráfico lo ha expresado la presidenta de la Diputación de Cáceres, Charo Cordero, tras recorrer la exposición de este artista cacereño, titulada “Puertas, límites y sendas”, que estará abierta hasta el 3 de noviembre en la Sala de Exposiciones Pintores 10.
Charo Cordero ha destacado la fuerza del trabajo de Agustín Luceño, retando así a cualquier tipo de límite, tanto por parte del artista, como por parte del público que decida irrumpir en esta exposición fotográfica y poética. “Encuentro poesía en sus imágenes y encuentro imágenes en sus palabras, es la cuadratura del círculo -ha dicho Cordero-, es la aspiración de toda sensibilidad, y la de Agustín Luceño, la sensibilidad de Agustín Luceño lo logra.
Además, a su juicio, esta exposición nos muestra límites, ya sea en forma de puerta, ya sea en forma de espejo, de barrera, de frontera o de cerradura, pero límites “para empujar a nuestro antojo”, y se ha referido al propio autor como claro ejemplo de esto, “ya que, por su profesión de fisioterapeuta dedica gran parte de su tiempo profesional a la investigación, y un hombre que investiga no tiene límites, y si a esto -ha añadido- se une esta faceta con la que nos sorprende hoy aquí, estoy convencida de que Agustín no se pone límites, y así debe ser el arte”. En este sentido, la presidenta de la Diputación ha reiterado lo que, en más de una ocasión, ha puesto de manifiesto que es el interés de la Institución provincial por que “la Cultura no tenga límites, una capítulo importante en el trabajo de la Diputación, de ahí el esfuerzo para que ningún rincón de Extremadura quede al margen de la cultura”.
Por su parte, Agustín Luceño reflexiona sobre la impresión que conlleva contemplar una frontera, “que invita al espectador a plantearse un doble dilema: si es posible y si es adecuado ir más allá, una cuestión tanto física como moral. ¿Entraría en esa finca? ¿Abriría esa puerta? ¿Miraría por el ojo de la cerradura?”, se pregunta, terminando por inclinarse hacia el respeto a la privacidad, “penetrando con el objetivo solo en interiores deshabitados o en espacios públicos”. De este modo, contemplaremos imágenes de una naturaleza sugerente, unas lindes naturales unas, artificiales otras; murallas y tejados cubiertos por plantas, alambres de espinos envueltos en telarañas… También la presencia humana, recuerda Agustín Luceño, “la presencia humana, insinuada en las construcciones y habitáculos, sin apenas figuras, más bien sombras, que aparece plenamente con los espectadores interaccionando”.
La muestra se articula en cinco series fotográficas: “¿Límites?”, “Vida vegetal”, “Reflejos”, “Luces y sombras fronterizas” y “Microcosmos invisible”, mostrando esta última lo oculto al ojo humano, a través del microscopio.
Agustín Luceño nació en Cáceres, en 1962, y es conocido en su ciudad, y fuera de ella, por su profesión: fisioterapeuta y osteópata. Aunque, durante años, ha mostrado conocimientos e interés por la literatura, el teatro y la fotografía, ahora sorprende con esta primera exposición donde se combina la fotografía y la poesía.
Se puede visitar en la Sala de Exposiciones Pintores 10 hasta el próximo 3 de noviembre, con horario, de lunes a viernes, de 10:00 a 14:00 horas y de 17:00 a 20:00 horas.
Se adjunta catálogo de la exposición